Cuando entras en Secuencia de Inútiles, el espacio de Ronda de Segovia 38, te quedas sorprendido por el trabajo de Florencia Kettner. Ha llenado las paredes de mas de 200 dibujos, colocados sobre fondo de papel de periódico, ocho en gran formato, sobre tela en lugar de papel. Algunos de los protagonistas son Judith y Holofernes o Saturno devorando a su hijo.
Saturno I
Llegué alegre a ver la exposición y lo primero que me asombró es la fuerza del dibujo, el placer y la energía que transmiten, totalmente del lado de eros. Una sensación de cueva o de útero da la sala. Un poco también la sensación de cuando entrabas en aquellos garitos viejos, sobrecargados de imágenes, de vida y alcohol derramado, como si las visiones de los antiguos clientes y tertulianos fuesen también parte.
Judith III
Hito Steyerl y su obra "ARTE DUTY FREE. El arte en la era de la guerra civil planetaria" es un referente para la artista a la hora de enfrentarse a su trabajo y para comprender su posición y su forma de actuar en el mundo del arte. De su lectura ha salido "Ruido-Señal", la exposición que nos ocupa.
Agnus dei
Nada le es ajeno a Florencia Kettner: las relaciones de poder entre los cuerpos, la guerra, el conflicto, la iglesia, las migraciones, el nuevo status de los animales, la precariedad laboral.
Curiosamente su exposición no me produjo malestar, sino cierto morbo: el de nuestras contradicciones por vivir en un mundo inhabitable pero a la vez muy atractivo, con sus espacios para la naturaleza, la amistad, la conversación, la lucha, la pareja, la maternidad. La vida y su capacidad para abrirse paso entre las ruinas, entre los escombros morales y las ciudades destruidas.
Conversación con uno mismo
No puedo evitar pensar en Román Reyes, y su conversación permanente con Pasolini, al pensar en la intensidad de los dibujos:
"SOLO L´AMARE, SOLO IL CONOSCERE CONTA
El poeta grita su propia piel y el espejo hiela el abrazo. Viento que circula cuerpos, sin romper complicidad alguna. Herida de complicidad. O de vacío radical. Bajé a la luz por si las sombras eran sólo sótanos invertidos. Miradas que miran fugas. Entre cuerpos traspasados. Y eran flujos de huellas, nada más. Y grité entonces la inmediatez del silencio. (Que ya no era piel, ni viento... ni siquiera huella). Solo el nombre del deseo, deseando soledad".
Esa es la tarea de la creación, la palabra o el dibujo que nos transforma, nos hace otros. Ese acto que nos permite salir de nosotros mismos, transformándonos. Ese proceso que desde la intuición nos acerca a lo mas nuestro.
Diáspora femenina
El sueño de la razón
La camisa de fuerza
Pensaba en lo que habría disfrutado Florencia dibujando y rellenando hojas: mancha, dibujo... Sin vuelta atrás, si acaso romper y seguir.
Lo que me gusta es estar en el estudio trabajando sin parar. Cómo le digo a mi familia que no quiero ir de vacaciones, se quejaba. Bueno, si quiero ir...
La máquina del tiempo
No puedo evitar pensar que los dibujos de Florencia Kettner son mas foucaultianos que expresionistas, quizá sea una barbaridad, mejor diré que tienen ese toque expresionista, pero un expresionismo que ya ha descubierto al Foucault de "las relaciones de poder penetran en los cuerpos", el sociólogo que abrió tantos caminos para entender, para saber qué nos pasa, en que han quedado los fuegos de la inquisición en los que todavía ardemos por "nuestra propia voluntad".
Judith VII
Cada espectador hará su propia selección de obras, enhebrará sus deseos, desatará sus miedos... la sala será espejo o refugio. Una exposición profundamente valiente, sincera, llena declaraciones de amor a la historia de la pintura. Y esa libertad catártica para dar a luz un trabajo que es también una forma de ver la vida.
Para saber más sobre el libro de Hito Steyerl:
“Sobre
el arte no solo orbitan el capitalismo neoliberal, las bienales, las
ferias, internet, sino también la especulación inmobiliaria, la
evasión fiscal, el lavado de dinero, las off shore y la
desregulación del mercado financiero”.
HITO
STEYERL
ARTE
DUTY FREE. El arte en la era de la guerra civil planetaria
El
arte es la presa ya alcanzada por el capitalismo y no lo sabe: finge
demencia ante los efectos de las políticas de shock del Imperio que
lo posibilita. Entonces, nos planteamos con Steyerl una nueva
“autonomía artística”. Ya no se trata de liberar al arte de una
función social, religiosa o comercial, sino de que asuma sus
condiciones de existencia. Nuestras condiciones como artistas son los
trabajos mal pagos y voluntariado impago, nuestras vidas endeudadas,
la oligarquía financiera que nos subsidia, la falta de tiempo para
las lecturas y las caricias, el acecho de información digital y
el spam vayas
donde vayas. ¿Cómo producir un arte crítico de sus condiciones
provistas por los Estados-Mercado, y crear instituciones y obras
comunes con fondos mixtos gestionados de modo comunitario? Quizás ya
lo estemos haciendo en muchas de nuestras prácticas y maneras de
organizarnos para producir: es cuestión de componer con esas
experimentaciones de la producción artística y, al mismo tiempo,
considerar a esas autonomías artísticas como experimentaciones que
pueden derramarse en el campo de la “autonomía política”.
Artistas
y trabajadores del arte del presente nos juntamos y nos organizamos.
Asumimos que la mayor parte de nuestra producción artística ha sido
subsidiada por nosotros mismos. Nos hacemos de trabajos diversos a
nuestra práctica e ingresos mixtos para bancar las obras que hacemos
y las vidas que llevamos. Nuestra autonomía trata de planear e
instituir las agencias colectivas necesarias, para que las
infraestructuras operativas de circulación de nuestras obras y
acciones funcionen de manera diferente; inteligir el modo como
nuestras decisiones reestructuren las ganancias de los inversionistas
y favorezcan a la comunidades artísticas; repautar los contratos con
salas, galerías, museos, editoriales, festivales, etc.; exigir los
registros públicos de las transacciones y localizaciones de obras de
arte para impedir el lavado de dinero y la evasión impositiva;
declinar vínculos con patrocinadores y mecenas y dejar de financiar
la fabricación de armas y la distribución de la pobreza; proponer
economías públicas, instituciones del arte, funcionamientos de
mercado; organizar nuestra autosustentabilidad de modo colectivo;
prepararnos subjetivamente para decir “no” a la coptación y
precarización laboral de gobiernos, corporaciones y patrocinadores
fascistas y usar ese tiempo para colaborar con colegas y organizar
instituciones comunes.
Lobo
suelto bloghttp://lobosuelto.com/arte-en-guerra-una-lectura-del-libro-arte-duty-free-de-hito-steyerl-silvio-lang/
Florencia Kettner
"Ruido-Señal"
Secuencia de Inútiles
Ronda de Segovia, 38.
Madrid
Hasta mediados de noviembre